En una audiencia flexible y multipropósito se abordó un caso de violencia intrafamiliar y de género, que llevó a un hombre de 38 años a seguir detenido con prisión preventiva.

Según la acusación, las agresiones por las que fue detenido en un primer momento habrían ocurrido en presencia de los hijos que víctima e imputado tienen en común. Durante la audiencia, la mujer manifestó su temor frente al acusado y pidió ser resguardada tanto ella como sus hijos. 

El juez de Garantías Diego Rodríguez Pipino escuchó los fundamentos de las partes y tuvo en cuenta además del peligro de fuga y de entorpecimiento del proceso judicial, los antecedentes condenatorios que el hombre ya registra por hechos de violencia a la misma víctima, por lo que decidió no hacer lugar al pedido de medidas sustitutivas de la prisión que había sido solicitado por la defensa, y ordenó la prisión preventiva del imputado. 

El hombre fue acusado como presunto autor del delito de lesiones agravadas por el vínculo y por el género, y continuará detenido en la Alcaidía General. Se ordenó además la realización de un examen psicológico integral buscando profundizar en su perfil y conducta.