El hecho salió a la luz cuando la víctima, una niña de 12 años, le contó a la directora de su escuela que desde que tenía 9 era abusada sexualmente por su padrastro. La mujer puso en conocimiento lo referido por la menor a la madre, quien luego radicó la denuncia en la comisaría quinta contra el que en ese momento ya era su expareja. 

El 24 de abril pasado la niña declaró en Circuito Cerrado de Televisión (CCTV) y contó que durante las vacaciones, mientras su mamá iba a hacer zumba por la mañana y la dejaba al cuidado de su pareja, él aprovechaba y la tocaba en sus partes íntimas. Agregó que en otras ocasiones le bajaba el pantalón y la bombacha y abusaba de ella. Incluso contó que le pegaba a su hermano y lo metía en la ducha con agua fría. 

Recordó que vivía con ellos desde que la niña tenía unos 6 años, iba a segundo grado. Contó que antes vivían en la casa de la mamá de él, y allí fue que comenzó todo. Luego continuó cuando se mudaron a vivir con sus abuelos maternos. Después de la primera vez que sucedió no le contó a nadie porque le tenía miedo, ya que amenazaba con pegarle a su hermano. 

La jueza de Garantías 8, Claudia Puertas, en una audiencia flexible y multipropósito fijada por la Oficina Judicial de Garantías (OfiJu) en el marco del plan piloto de oralidad, declaró procedente el acuerdo de juicio abreviado al que llegaron las partes intervinientes y condenó a un hombre de 29 años.

Le impuso la pena de ocho años de prisión efectiva por ser autor de los delitos de abuso sexual simple agravado por la guarda y la convivencia con un menor de 18 años de edad continuado y abuso sexual con acceso carnal agravado por la guarda y convivencia con un menor de 18 años de edad continuado, todo en concurso real. 

Será trasladado a la Unidad Carcelaria 1 de Villa Las Rosas para el cumplimiento efectivo de la pena que se le impuso. Además se ordenó su incorporación en el Banco de Datos Genéticos, previa asignación del DUIG por el Registro provincial de condenados vinculados a delitos contra las personas y contra la integridad sexual.

El hombre, que fue detenido el 17 de abril pasado, cumplirá la pena el 17 de abril de 2032. Durante su encierro realizará tratamiento psicológico para el control de los impulsos sexuales.