La causa principal que llevó a dos hermanos a ser detenidos se originó a partir de un caso de maltrato animal ocurrido entre el 10 y el 15 de mayo en el domicilio de los hermanos, ubicado en el barrio Primavera de Orán.
Fueron acusados de haber quemado vivo a un perro y de haberlo abandonado dentro de un cajón en la vía pública. Un vecino fue quien observó el hecho, intentó socorrer al animal y posteriormente realizó la denuncia al 911.
Durante un allanamiento llevado a cabo por la Brigada de Investigaciones en el domicilio de los acusados, se hallaron dos perros atados y embadurnados en aceite, así como huesos calcinados encontrados cerca de una fogata y entre los residuos del lugar. Las primeras pericias sugieren que estos restos podrían corresponder a otros animales que también habrían sido quemados.
El hermano mayor enfrenta también cargos por robo simple, amenazas con arma en tres hechos, y exhibiciones obscenas en concurso real. Por su parte, el más chico está imputado por crueldad animal y robo simple en concurso real.
Cabe destacar que un informe socioambiental realizado en la zona de residencia de los acusados reveló que los vecinos se quejaban de la violencia de los hermanos, que ya habían sido denunciados con anterioridad.
El juez de Orán
Gustavo Ramiro Morizzio ratificó la detención y dispuso la prisión preventiva para los dos hermanos, de 28 y 31 años. La medida fue ordenada en una audiencia flexible y multipropósito, en la que se ordenó que sean trasladados de inmediato a la Alcaidía.
