El incidente que llevó a la detención de un joven de 24 años ocurrió el 22 de mayo pasado en el barrio Aeroparque de la ciudad de Orán. 

Los policías estaban realizando un patrullaje preventivo y lo vieron en actitud sospechosa, por lo que decidieron detenerse. Al intentar identificarlo el joven se puso agresivo, y cuando el móvil se retiraba del lugar comenzó a tirarle piedras, lo que provocó que el vidrio de la luneta se rompa. Además una de esas piedras impactó en la cabeza de un agente que iba en la caja de la camioneta.

Tras el ataque, se inició una persecución, y el acusado se refugió en el domicilio de un familiar, y vecinos que vieron lo sucedido comenzaron a agredir también a los efectivos para evitar su detención, lo que obligó a la policía a solicitar refuerzos. El agente lesionado fue atendido en el hospital local, pero luego lo derivaron a Salta debido a la gravedad de sus heridas.

El juez de Orán Ramiro Morizzio declaró procedente el acuerdo de juicio abreviado presentado por las partes durante una audiencia flexible y multipropósito y condenó al joven a la pena de un año de prisión de ejecución condicional por ser autor de los delitos de atentado a la autoridad, lesiones graves agravadas por ser en perjuicio de un funcionario público y daños calificados, todo en concurso real. 

Como parte de la condena, el joven deberá cumplir una serie de reglas de conducta y ofreció la suma de quinientos mil pesos, la que será destinada a la reparación de la luneta del móvil policial y al resarcimiento económico del agente lesionado.