El juez Raúl Fernando López, vocal de la Sala II del Tribunal de Juicio de Orán, condenó a un joven de 26 años por el delito de abuso sexual simple. La pena impuesta fue de un año de prisión de cumplimiento condicional. Esto significa que el joven no irá a prisión a menos que incumpla las medidas establecidas.

Se advirtió que si el condenado no cumple con estas reglas, el tribunal podría revocar la condicionalidad de la pena, y esta se haría efectiva.

Además de la pena, el juez dispuso que se le realice al imputado un examen médico y la extracción de material genético para su incorporación al Banco de Datos Genéticos. Esta medida se toma en cumplimiento de la Ley 7775 y su reglamentación.

La denuncia de este hecho fue realizada por la abuela de la víctima, quien en ese momento tenía ocho años. La abuela relató que al mediodía, su nieta estaba vendiendo bizcochuelos cerca de una plazoleta en la localidad de Hipólito Yrigoyen cuando se le salió la cadena de su bicicleta.

Un hombre se acercó y se ofreció a ayudarla, llevándola hasta su taller de motos cercano al lugar. Mientras le arreglaba la bicicleta, la niña le comentó sobre un accidente que había tenido en su rodilla. El hombre le dijo: “Dónde, dejame ver”, le tocó la rodilla y luego comenzó a tocarle sus partes íntimas. La niña comenzó a llorar y el sujeto la dejó irse.