Un hombre de 35 años fue condenado a ocho años de prisión como autor del delito de abuso sexual con acceso carnal, lesiones leves agravadas por la relación de pareja preexistente y por el género (dos hechos) y coacción, todo en concurso real. La audiencia de debate se llevó a cabo en la Sala II del Tribunal de Juicio, presidida por la jueza María Victoria Montoya Quiroga.
El sujeto fue denunciado por su expareja en junio de 2023, en la Comisaría 2 de Rosario de Lerma. La víctima relató que había mantenido una relación de un año y medio con el acusado y que había decidido separarse por sus reiteradas actitudes violentas. Contó que no habían tenido hijos en común pero ella tenía un adolescente de 17 años, con discapacidad, de una relación anterior. Señaló que el imputado había estado preso anteriormente y que, al salir, se fue a vivir con ella.
La víctima refirió que tras separarse, él regresó al domicilio de sus padres, en La Merced, pero seguía yendo a verla para exigirle dinero y para controlarla.
El 1 de junio de 2023, el sujeto se presentó en su domicilio. Sabía que ella había cobrado la pensión por discapacidad de su hijo y pretendía llevarse parte del dinero. En esa ocasión, reaccionó violentamente una vez más. La golpeó, le puso una almohada en el rostro impidiéndole respirar y la accedió carnalmente a la fuerza. Antes de irse le quitó el dinero y le advirtió que si lo denunciaba iba a matar a su hijo.
Poco después, el 6 de junio, el imputado volvió a presentarse en la vivienda de la damnificada para exigirle dinero. Además le ordenó que desbloqueara su celular para revisarle los mensajes. Ella se negó y entonces él tomo un cuchillo y le cortó un dedo.
La jueza dispuso el inmediato traslado del condenado a la cárcel penitenciaria local y que se le extraigan muestras de ADN para su inscripción en el Banco de Datos Genéticos.