Un episodio de violencia que se inició el pasado 17 de julio pasado culminó con la disposición de la prisión preventiva para un hombre de 35 años.
Los hechos fueron cometidos contra una mujer de 34 años y a su hija menor en la localidad de La Merced. Ese mediodía el acusado ingresó de forma violenta y sin autorización al domicilio de la víctima, ubicado en el barrio 25 de Mayo, y una vez adentro le exigió dinero.
Ella le dio, pero al parecer no era suficiente ya que él, enojado, la encerró a ella y a su hija cerrando las puertas con llave y bloqueando cualquier posibilidad de salida. Durante el tiempo que las mantuvo encerradas, la agredió físicamente mientras la amenazaba para evitar que pidiera auxilio o denunciara lo que estaba ocurriendo.
Al retirarse de la vivienda la amenazó gravemente, advirtiéndole que “pagaría por el tiempo que él estuvo detenido previamente”. Esta frase intensificó el temor fundado de la mujer, quien ya había sufrido y denunciado episodios anteriores de violencia por parte del mismo individuo.
Al día siguiente el imputado volvió a contactar a la víctima. A pesar de tener pleno conocimiento de las medidas de prohibición de acercamiento que pesaban en su contra, le manifestó en tono amenazante: “ya me notificaron de las medidas, ahora te las vas a ver”.
En una audiencia flexible y multipropósito la jueza de Garantías interviniente dispuso la prisión preventiva del hombre, quien quedó alojado en la Alcaidía General 1. Se le imputaron los delitos de violación de domicilio, privación ilegítima de la libertad doblemente agravada (por mediar violencia y amenazas, y por tratarse de una persona a quien debía un particular respeto), amenazas y desobediencia judicial.
Además ordenó que se le brinde asistencia psicológica y psiquiátrica con perspectiva de género para el control de sus impulsos violentos.