Un sujeto de 51 años fue condenado en juicio abreviado a tres años de prisión condicional por resultar autor del delito de abuso sexual simple.

El imputado fue denunciado por un hecho ocurrido en febrero de este año en la localidad de La Viña. La madre de la víctima señaló que su hija, de 50 años, padece una afección psiquiátrica (esquizofrenia residual) que le impide expresarse y entender sus actos.

Relató que el 27 de febrero le pidió a un vecino que fuera a las 5 de la mañana a su domicilio para quedarse con su hija ya que ella debía viajar a Salta para hacer trámites. El cuidador le contó luego que cuando llegó advirtió que no había luz. Fue al dormitorio de su hija alumbrando con el celular y, al entrar, vio que había un hombre en la cama de la víctima. Estaba encima de la mujer y tenía los pantalones abajo.  

El imputado se levantó rápidamente y huyó, pero el cuidador alcanzó a verle la cara. Más tarde encontró en el suelo, en la habitación de la damnificada, un carné de conducir y una cédula verde a nombre del acusado.

La denunciante sostuvo que reconoció al acusado porque solía ir a venderle paltas y yuyos. Dijo que incluso un par de veces la había ayudado a cortar leña.

Para conservar la modalidad de prisión en suspenso, el condenado deberá cumplir las siguientes reglas de conducta durante dos años: abstenerse de usar estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; someterse a tratamiento psicológico previo informe que acredite su necesidad y eficacia y presentar las constancias correspondientes; abstenerse de de entablar cualquier tipo de contacto con la damnificada y de acercarse a menos de trescientos metros de su domicilio y de lugares que ella frecuente.

El juez Leonardo Gabriel Feans, vocal de la Sala I del Tribunal de Juicio, tuvo presente como reparación del daño la ofrecida voluntariamente por el acusado, consistente en la entrega de  400 mil pesos.

Durante el procedimiento abreviado, el imputado aceptó la pena solicitada y reconoció su participación en el hecho denunciado.