Un episodio de robo terminó con la prisión preventiva para el joven acusado, con una medida adicional: tratamiento para sus adicciones.
El hecho sucedió el 4 de agosto pasado cerca de las 9 de la mañana. Un hombre de 35 años ransitaba en su motocicleta cuando fue interceptado por un grupo de entre tres y cinco personas en las cercanías del puente de la calle Ituzaingó. Los asaltantes lo intimidaron con un arma blanca para sustraerle el vehículo y todas sus pertenencias personales, que incluían su celular y dinero en efectivo, e incluso sus calzados y prendas de vestir. Además la víctima también recibió golpes de puño.
La intervención policial permitió la detención del imputado, un joven de 26 años de edad, instantes después de que abandonara la motocicleta sustraída e intentara huir hacia los márgenes del río.
En una audiencia flexible y multipropósito el juez de Garantías interviniente, tras escuchar a las partes dispuso la prisión preventiva del joven, acusado por la posible comisión del delito de robo agravado en poblado y en banda, por lo que continuará alojado en la Alcaidía General de la Provincia mientras avanza la investigación.
Además ordenó que el imputado sea sometido a tratamiento por adicciones mientras dure su detención, bajo la estricta supervisión del servicio penitenciario.