El juez Pablo Farah, vocal interino de la Sala II del Tribunal de Juicio, condenó en procedimiento abreviado a Agustín Solá Garrido (42) a la pena de dos años y cuatro meses de prisión de ejecución condicional e inhabilitación especial para el ejercicio del cargo público que motivó la conducta por el mismo tiempo de condena.

Solá Garrido fue encontrado autor penalmente responsable de los delitos de exacciones ilegales (once hechos), en concurso real; incumplimiento de los deberes de funcionario público y ejercicio ilegal de la profesión, en concurso ideal.

El juez le impuso al imputado las siguientes obligaciones por el término de dos años y cuatro meses: fijar residencia y comunicar dentro de las 48 horas cualquier cambio al tribunal; someterse al cuidado del Programa de inserción social y supervisión de presos y liberados; adoptar oficio, arte o profesión adecuado a su capacidad. Todo ello con apercibimiento de revocarse la condicionalidad de la pena dictada.

El imputado se desempeñó como auxiliar fiscal penal de Rosario de la Frontera hasta 2017. Fue denunciado por exigir dádivas a distintos contraventores en beneficio propio. Solicitaba el dinero en concepto de “gastos administrativos”.