El juez de la Sala III del Tribunal de Juicio, Pablo Farah, condenó en juicio abreviado a un hombre de 28 años a la pena de un mes de prisión de ejecución condicional, por ser autor del delito de hurto simple.

Por el término de dos años deberá fijar domicilio y someterse al Programa de Reinserción Social de Presos y Liberados. Además tendrá que abstenerse de usar sustancias estupefacientes y abusar del consumo de bebidas alcohólicas. Finalmente tendrá prohibido acercarse y mantener contacto con la víctima, o ejercer actos de violencia de cualquier tipo contra él y su grupo familiar. En caso de incumplir alguna de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la modalidad condicional de la pena impuesta.

En el mismo fallo, un hombre de 38 años fue sobreseído del delito de hurto simple por el que había sido acusado, teniendo en cuenta que desde la fiscalía se retiró la acusación.    

El 9 de octubre de 2022 el joven se encontraba en un bar cercano a la terminal. Como se estaba quedando sin batería, le dio su celular (que tenía dentro de la funda una tarjeta de cobro) a la empleada del local para que se lo ponga a cargar.

Cuando le pidió que se lo devuelva, la joven le dijo que se lo habían robado, por lo que llamaron al Servicio de Emergencias 911, que detuvo al acusado. El damnificado recuperó su teléfono en ese momento.