Plan Piloto de Oralidad: uno condenado por robo y estafa; el otro sólo cometió el robo
Plan Piloto de Oralidad: uno condenado por robo y estafa; el otro sólo cometió el robo
El 17 de marzo pasado un joven ingresó en un local de vinería de la ciudad de General Güemes y se llevó dos botellas de fernet valuados en la suma de diez mil pesos cada uno. El acusado le había dicho al empleado que lo atendió que le realizaría la transferencia correspondiente, pero luego salió corriendo del local.
El joven quedó filmado por las cámaras de seguridad del comercio, por lo que pudo ser individualizado, ya que es reconocido en la zona por sus antecedentes delictivos.
Cuatro días después, dos jóvenes se acercaron a otro denunciante mientras éste empujaba su motocicleta, con el supuesto propósito de prestarle ayuda. Pero uno de ellos lo agredió de un golpe de puño en la cabeza, y cuando cayó empezaron a patearlo entre los dos. Así fue que le sustrajeron su teléfono celular y la motocicleta y se dieron a la fuga. El denunciante se presentó en el domicilio más cercano, donde lo auxiliaron.
El juez de Garantías 4, Diego Rodríguez Pipino, encabezó una audiencia flexible y multipropósito fijada por la Oficina Judicial de Garantías (OfiJu) en el marco del plan piloto de oralidad, durante la cual las partes llegaron a un acuerdo de juicio abreviado.
J. R. F., un joven de 20 años fue condenado como coautor del delito de robo simple y autor de estafa, y cumplirá la pena de dos meses de prisión de ejecución efectiva. Será trasladado a la Unidad Carcelaria 1 de Villa Las Rosas, donde continuará detenido hasta cumplir su condena el 21 de mayo próximo.
Por su parte, I. E. R., también de 20 años, fue condenado a la pena de un mes de prisión de ejecución condicional por ser coautor del delito de robo simple. Al finalizar la audiencia recuperó su libertad, pero antes fue notificado de la obligación de dar cumplimiento a reglas de conducta durante dos años.
En ese sentido, deberá fijar domicilio y comunicar cualquier cambio. No podrá acercarse a la víctima y a los lugares que esta frecuente en un radio de doscientos metros y tendrá prohibido el contacto con ella por cualquier medio. Deberá abstenerse de usar estupefacientes o de abusar del consumo de bebidas alcohólicas. Finalmente, realizará diagnóstico para posterior tratamiento de consumo problemático de drogas y aprenderá algún oficio, arte o profesión. En caso de no cumplir alguno de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la condicionalidad de la pena impuesta.
El joven quedó filmado por las cámaras de seguridad del comercio, por lo que pudo ser individualizado, ya que es reconocido en la zona por sus antecedentes delictivos.
Cuatro días después, dos jóvenes se acercaron a otro denunciante mientras éste empujaba su motocicleta, con el supuesto propósito de prestarle ayuda. Pero uno de ellos lo agredió de un golpe de puño en la cabeza, y cuando cayó empezaron a patearlo entre los dos. Así fue que le sustrajeron su teléfono celular y la motocicleta y se dieron a la fuga. El denunciante se presentó en el domicilio más cercano, donde lo auxiliaron.
El juez de Garantías 4, Diego Rodríguez Pipino, encabezó una audiencia flexible y multipropósito fijada por la Oficina Judicial de Garantías (OfiJu) en el marco del plan piloto de oralidad, durante la cual las partes llegaron a un acuerdo de juicio abreviado.
J. R. F., un joven de 20 años fue condenado como coautor del delito de robo simple y autor de estafa, y cumplirá la pena de dos meses de prisión de ejecución efectiva. Será trasladado a la Unidad Carcelaria 1 de Villa Las Rosas, donde continuará detenido hasta cumplir su condena el 21 de mayo próximo.
Por su parte, I. E. R., también de 20 años, fue condenado a la pena de un mes de prisión de ejecución condicional por ser coautor del delito de robo simple. Al finalizar la audiencia recuperó su libertad, pero antes fue notificado de la obligación de dar cumplimiento a reglas de conducta durante dos años.
En ese sentido, deberá fijar domicilio y comunicar cualquier cambio. No podrá acercarse a la víctima y a los lugares que esta frecuente en un radio de doscientos metros y tendrá prohibido el contacto con ella por cualquier medio. Deberá abstenerse de usar estupefacientes o de abusar del consumo de bebidas alcohólicas. Finalmente, realizará diagnóstico para posterior tratamiento de consumo problemático de drogas y aprenderá algún oficio, arte o profesión. En caso de no cumplir alguno de estas reglas de conducta podría dejarse sin efecto la condicionalidad de la pena impuesta.
/Poder Judicial de Salta