La jueza de Garantías 8 Claudia Puertas dictó la prisión preventiva para un hombre acusado y detenido por hechos de violencia de género en perjuicio de su pareja. 

El hombre está imputado como presunto autor de los delitos de privación ilegítima de la libertad agravada por el uso de violencia y por ser la víctima una persona a la que se debe un respeto particular; abuso sexual con acceso carnal continuado; lesiones leves agravadas por el género y la relación de pareja previa; defraudación; amenazas; homicidio calificado por la relación de pareja previa y por mediar violencia de género (femicidio) en grado de tentativa; coacción; desobediencia judicial, en concurso real. En otra investigación está acusado provisoriamente como autor del delito de tenencia de estupefacientes con fines de comercialización. 

La investigación comenzó por la denuncia de la madre de la víctima, que luego fue ratificada por la joven. Los hechos habrían sido cometidos en un contexto de violencia de género agravados, por una parte por la vulnerabilidad de la víctima, y por otra parte, según lo sostuvo la fiscal, teniendo en cuenta que se habrían cometido en su perjuicio todas las formas de violencia, tanto psíquica como verbal, física, sexual, y finalmente violencia contra su vida. 

Ella contó que el día del hecho comenzaron a discutir luego que él le había sacado la tarjeta de crédito con la finalidad de pagar la cuenta de Netflix que tenía instalada en su domicilio, donde ella estaba de visita. Tras discutir él la habría agredido físicamente. Cuando ella trató de salir del lugar el acusado no se lo permitió. Agregó que fue entonces cuando empezaron a tirarse diferentes elementos, hasta que él, con un vidrio roto la habría cortado en el cuello. 

En su denuncia dijo que había abusado de ella en reiteradas ocasiones tras suministrarle drogas, y que la sometía a coacciones y amenazas constantes. 

El 15 de mayo fue detenido a raíz de un allanamiento ordenado en el marco de esas denuncias, pero en el procedimiento se le secuestraron cerca de dos kilos de drogas, que luego del análisis correspondiente resultó ser marihuana. 

La jueza tuvo en cuenta al momento de resolver los pedidos de las partes que la fiscalía había acreditado de manera suficiente la verosimilitud del derecho, y que existe además un peligro de fuga y de entorpecimiento a la investigación en caso de otorgarse la libertad del hombre. Tuvo en consideración también la naturaleza y gravedad de los hechos por los que se encuentra provisoriamente acusado, y que en caso de seguir con la presente imputación y de recaer sentencia condenatoria, la misma sería mayor a diez años, y por ello de cumplimiento efectivo.

En su sentencia decidió no hacer lugar al pedido de libertad planteado por la defensa y exhortó a la fiscal interviniente a acumular los dos legajos de investigación seguidos contra el hombre para que se tramiten en una sola fiscalía.